Las tres caras de la moneda: Realismo fantástico, conspiranoias y fake news como distopias del sentido común


"El viejo mundo se muere. El nuevo tarda en aparecer. 
Y en ese claroscuro surgen los monstruos"
Antonio Gramsci (1891-1937), Cita 

“El futuro no tiene realidad sino como esperanza presente”
Jorge L. Borges, Tlön, Uqbar, Orbis Tertius (1940)

Si algún aspecto del ahora que no es hoy comenzó en algún momento del pasado, 1960 seria seguramente el año, un libro seria el formato y su nombre, "Le Matin des Magiciens" o "El Retorno de los Brujos". Sus autores, Louis Pauwels y Jacques Bergier, serian la anécdota a reseñar de no mediar el cataclismo semántico que promete arrojar la humanidad a un terraplanismo tecnológico tan absurdo como dramático próximamente.

En el marco del cierre de las vanguardias históricas de principios del S. XX, la década del 60 arribo al fin del arte como manifestación vital de las actividades humanas y su moral de posguerra, convirtiendo este gesto estético en una herramienta política global, "Libertad y Espontaneidad versus Totalitarismo y Planificación" seria la grosera síntesis de un conflicto muy poco claro en su quien es quien pero brillantemente iluminado en sus porque.

El pensamiento científico como motor de la racionalidad occidental, ramificado en el temprano sentido común que amplificaron las comunicaciones que consigo trajo la revolucion industrial de mediados del S. XIX, avanzo creando los márgenes necesarios para que su imagen no se pierda en el espejo deformante de lo social y las insalvables distancias que se encontraba generando el capitalismo con respecto al porque de cada cosa y su posterior acceso como "saber". El método se convirtió así en condición y de allí, la existencia misma paso a formar parte de su sistema de control que de tan evidente se torno lógico y primordial hasta la trivialidad.

Cuentan que la década del 20, tras una gran guerra, un crack económico global y revolucion rusa mediante, permitió que las primeras grietas en esta construcción de lo real comiencen a intuirse primero, para apreciarse después, como parte de su propio entramado, no verlas era casi lo mismo que tenerlas en cuenta en su aspecto tan necesario como constitutivo, los errores formaba parte de la idea a punto tal que su propia regeneración permitía la expansión de todo el sistema, ya que en su legitimidad de origen estaba la llave a todas las posibilidades del mismo.

La desconfianza es una forma de ceguera mientras de ello dependa la supervivencia de un tejido social compartimentado y especializado en verticalismos de toda clase, que todo deje de ser como es por alguna razón que desconocemos es casi un gesto libertario entre tanta apatía inducida. La catarsis sistémica que significo una nueva guerra y el fin del humanismo tal cual se lo entendido hasta ese momento, libero la zona de confort en que se encontraba dispuesto el parecer general para que surrealismo, psicología y misticismo cayeran como una sola gota sobre el ojo que se animase a mirar hacia arriba. 

El futuro en su imposibilidad material inmediata es la certeza de que el orden no es tal, sino mas bien la ilusión de la cual depende todo, casi. Los medios que permiten la propagación de este espejismo son el fin mismo que retroalimenta los conceptos de verdad y su negativo en el plano, la posverdad porque... mentira, lo que se dice "mentira" es hablar de otra cosa...

PD:... ¿Ciencias ocultas misticismo y ciencia ficción en el rock argentino?... nada mejor que lo menos esperado del hermano de Andres Calamaro y lo único que podía esperarse de Hernan Darwin Reyna, siempre...

(Facundo G. Aguirre, Nuñez, 30/9/2020)


El Corte - El camino contrario (1987)
(Full Album)

Comentarios